Hoy traigo una de esas joyas que encuentro de las que realmente me enamoro.
No es que sea el ideal perfecto, pero sin duda, tanto su arquitectura, como su estilo , me parecen espectaculares.
Se trata de una edificio que data de 1860, y que tratando de recuperar su esencia, se opta por una renovación que mantenga aquellos detalles que realmente recuerdan a un estilo clásico.
Vestida y pensada en colores como el gris oscuro, blanco y beige, cada estancia mantiene una estética elegante.
Con un mobiliario completamente a medida, donde todo se adapta y se encaja a la perfección siendo los pequeños detalles los que sean protagonistas.
Os podrá gustar mas o menos el color…(a mi personalmente me parece super elegante, pero no para tooooda la casa) pero si lo que quieres es morir de amor….descubre ese magnifico vestidor. Uala!!!
Los suelos, al contrario que en otros interiores, se realiza con un cerámico imitación madera (muy seguramente porque posea suelo radiante) pero ademas de su aspecto natural, se coloca con un color oscuro…algo menos normal en los interiores nórdicos.